Para estar radiante no hace falta tener unas medidas perfectas, solo necesitas estar bien con tu cuerpo y trabajar unas zonas para resaltarlas. ¿Quién no sueña con una cintura pequeña, con el abdomen plano y tonificado o con una silueta más contorneada? Eso se puede conseguir con ejercicio, una buena alimentación, tratamiento o intervenciones estéticas específicas para lograr resultado más rápidos y duraderos.
Aún queda mucho tiempo para lucir el bikini, pero el tiempo vuela y es mejor ponernos desde ya a obtener el cuerpo que deseamos antes que nos pille el toro. Una figura agradable a la vista levanta la autoestima y aporta una dosis de seguridad.
El mejor apoyo: Los tratamientos estéticos
Muchos tratamientos que la medicina estética nos ofrece pueden ayudarnos en nuestro propósito:
. Mesoterapia corporal: Mediante infiltraciones de sustancias drenantes y reafirmantes ayudan a reducir volumen y mejorar el aspecto de la piel eliminando la celulitis y las estrías.
. Electroestimulación: Otra técnica que se puede tener en cuenta para conseguir nuestro objetivo y comúnmente se conoce como gimnasia pasiva. Este procedimiento produce contracciones musculares, que alcanzan los músculos más profundos y los hacen trabajar con mucha intensidad.
. Presoterapia: Actúa mediante botas compresoras que al inflarse y desinflarse generan presión, removiendo el exceso de líquido acumulado en los tejidos. El resultado es inmediato, no queda ni rastro de los signos de cansancio y pesadez.
Y además, la mejor opción para la grasa localizada: La lipoescultura.
La lipoescultura es procedimiento quirúrgico estético que tiene como finalidad esculpir el cuerpo, con la idea de darle una forma atractiva y estilizada, eliminando aquellas zonas que se resisten a desaparecer a pesar de todo el ejercicio o dietas que hagamos. Este procedimiento es la mejor opción, porque permite quitar grasa de forma más precisa, logrando una silueta estilizada, un nuevo perfil corporal con brillantes resultados.
Una buena alimentación y ejercicio diario
La regla de oro de estas tecnologías, que permiten realizar cambios importantes en el contorno corporal, es tener conciencia de que deben ser acompañados por hábitos adecuados: una dieta sana y la práctica de deporte a diario.
Es importante llevar una dieta depurativa y détox, para eliminar toxinas y sentirte más ligera, una dieta libre de grasas y carbohidratos. La hidratación es sumamente necesaria: beber agua, zumos o infusiones con el fin de evitar la hinchazón por retención de líquidos.
La buena alimentación es fundamental complementarla con la realización de una actividad física, lo que favorecerá la reducción de la flacidez y la grasa acumulada. Existen una gran diversidad de ejercicios que se pueden realizar en casa, en el gimnasio o donde quieras.
Para eliminar el tejido graso, los ejercicios aeróbicos son efectivos, porque hacen que el cuerpo utilice la grasa almacenada para producir energía. 40 minutos de actividad aeróbica a la semana es suficiente. Caminar rápido durante 30 minutos, correr, montan bicicleta, saltar la cuerda son alguno de los ejercicios recomendados.
Para endurecer y moldear las piernas y los glúteos, las sentadillas, la elevación de piernas y los desplantes son idóneos. Escuchar música mientras se practican estos ejercicios los hará más entretenidos.
Para tener una cintura perfecta y un abdomen plano, tenemos los abdominales. Existen diferentes formas de hacerlos para lograr trabajar todos los músculos del área abdominal.
La dieta, el ejercicio y los tratamientos estéticos deben ir combinados con un buen descanso y relajación para potenciar los resultados que se desean.